Las nuevas tecnologías se ponen al servicio de la ciudadanía y, gracias a ello podemos ver como los Sistema de información geográfica – GIS y participación ciudadana se unen para conseguir grandes objetivos de importancia para los ciudadanos.
Para no remontarnos mucho en la historia, podemos fijar el año 1948 como hito importante en los orígenes de la participación ciudadana. En dicha fecha, la declaración de los derechos humanos sentaba las bases por las que “Toda persona tiene derecho a participar en el gobierno y las funciones públicas de su país”. De este modo, los individuos que habitan como miembros de una comunidad son ciudadanos que, debido a dicha condición o ciudadanía, poseen derechos y obligaciones para con su Estado.
Esta cualidad de los ciudadanos lleva consigo entre otros derechos, el de que tengan las mismas oportunidades que los demás para influir en el destino de su sociedad. Esto es, participar en ella y en la toma de decisiones de esta, con el objetivo de un bien común.
Las nuevas tecnologías al servicio de la ciudadanía
Tiene sentido pues afirmar, que la defensa de la ciudadanía puede hacerse en cada decisión que se toma diariamente como ciudadanos.
Todo se mueve en torno al concepto de Estado, sus leyes e instituciones, y tal y como afirma el filósofo Javier Gomá, «el único sostén firme de la cultura y de la civilización es una ciudadanía ilustrada, no las leyes ni las instituciones».
Dicha ilustración, siempre necesaria, en los tiempos actuales debe ir acompañada por herramientas, hoy en día proporcionadas por las nuevas tecnologías, que permitan una participación sencilla, rápida, eficaz y por qué no, cuando sea necesario, geolocalizada para que ser totalmente fieles a la realidad en lo que se quiere proponer, contribuir o comunicar. La mayoría de estas participaciones, tienen asociado un componente espacial que puede reflejarse en un mapa, para su mejor interpretación.
Es evidente la importancia de una sociedad con una potente participación ciudadana. Que la tecnología, como en muchos otros ámbitos, juega un papel fundamental que va a más.
GIS, para la toma de decisiones
Participar en la comunidad, en último término, tiene como objetivo que se adopten las mejores decisiones. Si nos centramos en dicho concepto, el de la toma de decisiones, la información geográfica y su manejo mediante sistemas GIS (Geographic Information System) tienen mucho que aportar. Estos sistemas permiten la modelización de una gran cantidad de datos geoposicionados en el mundo real. Revelan conocimientos profundos de la información, patrones y relaciones y a su vez, ayudan a los usuarios (ciudadanos todos ellos) a elegir y decidir de una manera más eficaz.
Afortunadamente la colaboración y participación ciudadana en los gobiernos, es cada vez más abundante a día de hoy. Con diseños de sus ciudades, selección de obras, conceptos de datos y gobiernos abiertos, etc. En concreto, la aparición de sistemas GIS para la participación ciudadana, aplicaciones móviles y plataformas geográficas que permiten la interacción con el mapa y con la información espacial, son también cada vez más habituales para cualquier tipo de usuario, quedando atrás los tiempos en los que dichas herramientas eran casi exclusivas de usuarios muy especializados trabajando de forma aislada.
Aplicaciones de la tecnología GIS y participación ciudadana
Un gran ejemplo de implementación de tecnologías GIS y participación ciudadana es el de Los Ángeles GEO HUB. Una plataforma realizada sobre la tecnología de ESRI en la que literalmente, se pone a los datos a trabajar para el bien de la ciudadanía. Por un lado, para poder participar, los ciudadanos deben conocer qué ocurre y exactamente dónde en su ciudad. Por ejemplo, los residentes de Los Ángeles pueden analizar el estado de la limpieza de las calles o conocer de primera mano y en tiempo real las actividades de construcción y obras que se están realizando, sus licencias, presupuestos, plazos, etc.
Usuarios como generadores de información geolocalizada
Por supuesto, no solo pueden ver datos e interaccionar con ellos, sino que también pueden participar siendo ellos mismos, generadores de información geolocalizada, por ejemplo, con la introducción en el sistema por medio de un mapa, de necesidades específicas de reciclaje de sustancias contaminantes. Para ello, el L.A. HUB puso la tecnología a trabajar con una aplicación móvil (Collector App) y un formulario geolocalizado, de manera que los ciudadanos introdujesen sus peticiones, interaccionando así en tiempo real con los sistemas del Ayuntamiento.
Muchos de estos portales o GEO HUB exponen, además, formas de acceso mediante sistemas informáticos (API). Siendo estos métodos otra forma de participación, al permitir a cualquier persona crear nuevas aplicaciones o soluciones “encima” de las capas de información geográfica anteriores.
Una buena noticia es que no hay que salir de España e irse hasta California para ver esto. Para encontrar este tipo de sistemas funcionando, como podremos ver en estos dos claros ejemplos.
Por un lado, Decide Madrid, un espacio que fomenta entre los ciudadanos madrileños la participación ciudadana con el objeto de mejorar su calidad de vida. Aquí puede verse un mapa interactivo, en el que los ciudadanos han subido sus ideas sobre diseño urbanístico de manera geolocalizada.
Y por otro, la Oficina de Ciudad Inteligente de Valencia, que engloba un ecosistema de proyectos y aplicaciones como un Geoportal, un cuadro de mandos para la ciudadanía – Valencia al minut – y una APP – App Valencia con los que, por medio de tecnologías de información espacial, involucran al ciudadano en las decisiones e información para una mejor ciudad.
Un tipo concreto de participación es la llamada “Ciencia Ciudadana”. Es decir, la aportación altruista de datos relacionados con el entorno por parte de cualquier persona para fines científicos.
Existen una gran cantidad de aplicaciones y plataformas en las que los usuarios reportan información geolocalizada. Por ejemplo, sobre incidencias medioambientales, inventarios de especies, estados de conservación, recursos naturales, etc. Dicha información espacial posteriormente, puede ser descargada para nutrir estudios e investigaciones científicas.
Algunos ejemplos de esto son Biodiversidad virtual, GFIB, eBIRD e incluso el famoso Open Street Maps.
La participación ciudadana como objetivo de la Agenda 2030
Es evidente que la tecnología debe estar para eliminar barreras y que todo el mundo pueda llegar a tener voz. En este sentido, es importante destacar que facilitar que se debe facilitar que la ciudadanía colabore y participe por un bien común en sus ciudades. Eso está totalmente alineado con la Agenda 2030 de la Asamblea General de la ONU.
Esta hoja de ruta basada en el consenso internacional. Afirma que la tecnología debe apoyar a todos los componentes del desarrollo y una parte fundamental es la participación ciudadana. Por ejemplo en el Objetivo 11.3: “De aquí a 2030, aumentar la urbanización inclusiva y sostenible y la capacidad para la planificación y la gestión participativas, integradas y sostenibles de los asentamientos humanos en todos los países”
Una vez más, los Sistemas de Información Geográfica, son imprescindibles para el desarrollo de un futuro sostenible.